Entrevistas a autores y reseñas de libros
El legado de una Pandemia. Entrevista a Teresa Chamorro (El día que fui juzgada)
La Pandemia cambió la forma de ver el mundo como muchos otros sucesos históricos de la humanidad. A pesar de todo el sufrimiento vivido en ese tiempo, hubo también cosas positivas. La lectura de libros aumentó y así también lo hizo la escritura. Este es el caso de Teresa Chamorro, originaria de Panxón (España), quien es especialista en Enfermería Comunitaria. Sus primeros escritos han surgido desde muy joven cuando creaba pequeños relatos. Años más tarde, sus hijos fueron fuente de inspiración y ocuparon el lugar de protagonistas.
El confinamiento le permitió escribir su primera novela: El día que fui juzgada que hace alusión al cuarto mono derivado del proverbio de «Los tres monos sabios» en Japón; el cual reza «No decir el Mal, no ver el Mal y no escuchar el Mal». El cuarto sería «No hacer el mal». De hecho, en 1636 Hidari Jingorō realizó una escultura en madera ubicada en el santuario de Toshogu, en Nikko, al norte de Tokio (Japón). Hoy en día, los emojis de nuestros teléfonos utilizan los monos del proverbio para aplicaciones como Whatsapp, Facebook, entre otros.
Sinopsis
No recuerda nada, la luz le molesta, su cuerpo está marcado, debilitado, roto, perdido en la arena de una playa. Hay gritos y la situación se vuelve caótica en un torbellino de acontecimientos que se suceden demasiado rápido: el ladrido de un perro, una voz de alarma que la señala, las luces de una ambulancia, todo parece irreal y amenazador. Hay preguntas, rostros y mascarillas, en un mundo que ha dado la vuelta, las caras transformadas en fantasmas desconocidos tras una tela que oculta la mitad más importante de la expresión corporal. Cuando la niebla mental se va disipando, descubre que está tumbada en una cama de hospital con dos policías en la puerta. Hay un asesino suelto y ella es la principal sospechosa. ¿Qué está pasando?..., ¿qué día es hoy? Hoy es... el día que fue juzgada.
Entrevista por Gabriela Quintana.
—¿Qué te llevo a escribir un thriller y no otro género?
Supongo que son varios factores: suspense, una historia bien narrada, unos personajes creíbles, mucho ritmo, no ser predecible, y, un punto morboso y cruel, que no te deje indiferente. Además, es uno de los géneros que más me gustan.
—¿Cómo surgió la idea y cuánto tiempo pasó hasta que encontraste el momento para escribirla?
La idea surgió a través del miedo. Miedo a lo desconocido, a la situación que todo el mundo estaba viviendo en aquel momento: la pandemia. Esa etapa en la vida de todos que marcó, de alguna manera, un antes y un después. Como enfermera, trabajando en aquellos momentos en una unidad COVID, volvía a casa, desolada, horrorizada, triste… necesitaba desconectar y era casi imposible. De modo que quise plasmar parte de lo vivido, dejando también una personal y pequeña crítica social sobre la situación. Al final, se convirtió en una historia ficticia envuelta en un atrezo que le resultará reconocible al lector.
Pensé en lo rápido que normalizamos todo y una idea rondó mi mente: «…en mitad de la calle más transitada de Vigo, alguien con una mascarilla, pantalla, guantes (en un momento que todos lo veíamos como “normal”) saca un cuchillo, apuñala a alguien y con muchos testigos y sin huellas, ni un rostro, sale impune». Qué fácil es volverse invisible… ¿Es tan fácil suplantar una identidad en un hospital?
—¿La historia está basada en hechos o personajes reales?
Evidentemente la trama en sí no es real. Pero la situación vivida, como se sintió en los hospitales en aquellos momentos, los miedos, la responsabilidad y la incertidumbre del personal de sanidad, así como el lugar donde está ambientada, sí lo es.
Ambientada en Galicia, un pueblo de Pontevedra, Panxón, donde me he criado, y Vigo, la ciudad donde trabajo, y donde se encuentra el Hospital que sirve de escenario para el comienzo de la trama.
—¿Perseguías algún objetivo al contar esta historia?
En la vida real, la maldad me horroriza, no la entiendo. No entiendo por qué alguien haría daño a otra persona a propósito. Así como la violencia, las injusticias y todos esos sentimientos que en algún momento nos hacen vulnerables.
El objetivo que intento conseguir con esta historia es transmitir sentimientos y generar emociones.
—¿Qué autores te han influenciado para escribir?
Son muchos los grandes escritores que admiro, y entre ellos está Lorena Franco, Dolores Redondo y Eva García Sáenz de Urturi.
—¿Qué valores encuentras en la literatura actual española?
Creo que la literatura es una de las maneras fundamentales de nutrir la conciencia. Desempeña un papel primordial en la sensibilización de las personas hacia otros seres humanos. Además, ofrece elementos de reflexión acerca de la condición humana, la vida, la muerte y nuestro paso por el mundo.
—¿Qué deseas que encuentre el lector con tu obra?
Es un thriller, pero, sobre todo, una historia muy humana. De personajes muy imperfectos, como todo el mundo, al fin y al cabo, y de cómo sobrellevan eso en su día a día. Detrás de todo esto hay una historia terrible, porque es un thriller, varios asesinatos cuya investigación remueve muchos secretos y conciencias.
—¿Deseas hacer una saga, o estás ya escribiendo otra novela?
Pues ahora mismo estoy con dos proyectos a la vez, uno de ellos es un nuevo thriller, con los mismos personajes, donde el algún momento se solapa la vida de la protagonista.
Y el otro proyecto, menos avanzado es una novela negra con humor. Muy ilusionada con ambos propósitos.
ISBN: 9788412585827
Sello editorial: Literatura Abierta
Año de edición: 2022
© Gabriela Quintana Ayala
Narradora mexicana, traductora literaria y columnista en www.e-consulta.com. Lic. en Comercio Internacional (UIA, Puebla). Maestra en PNL. Diplomada en Literatura Norteamericana (BUAP). Publicaciones: Baúl de Cuentos 1 y 2 (2012, 2107, editorial BUAP, México), Me llamo Ángela y tengo un cromosoma más, Secretaría de Cultura de Puebla (México, 2020), Los Cocodrilos de París, El Desván de la Memoria (España, 2017), Miradas Difusas, Universidad Olmeca (México, 2021). Algunos de sus relatos han sido ganadores y otros seleccionados para antologías impresas. Ha colaborado en diversos medios como el periódico El Sureste de Tabasco (México), www.casabukowski.com (Chile); las revistas literarias Oceanum (España), Lo nuestro (Tabasco, México), Monolito (México), Aeroletras (México), entre otras.